El único León es el León de Rorá. Revolucionario y Guerrillero. Por Profesor Andrés Freira
Prof. Andrés Freire |
La pregunta para nosotros en este tiempo es sí elegimos ser víctimas o elegimos ser héroes, parece que lo épico ha sido cooptado no por las “fuerzas del cielo” sino por las fuerzas del mal, por los sacerdotes de la explotación. Los “gatitos mimosos del capital”, ahora se disfrazan de leones, pero son tan leones como el mono que en las Crónicas de Narnia toma la piel de un león muerto y se presenta como Aslan. Aquí también en nuestras tierras lentamente se va imponiendo esa nueva hegemonía, producto de la ideología del “es lo que hay valor”, que deja el progresismo.
Aún sin embargo hay tiempo para poner freno a esta nueva seguidilla en el proceso de fascistización que estamos viviendo, pero no es el gemido de las víctimas quien pondrá freno a tanta maldad, sino el bramido de los héroes. No salvaremos la seguridad social pidiendo por favor, lo haremos terminando con las AFAP.
No es nuevo el ropaje místico religioso de la ultraderecha, tampoco la invocación de Dios para discriminar y perseguir, y tampoco lo es el constantinismo, es decir la herejía que asimila la ciudad de Dios a la ciudad de los hombres, y que pretende transformar asuntos privados en temas públicos.
Lo hemos dicho muchas veces nosotros creemos firmemente en la laicidad del Estado, que es a la vez la salvaguardia de la libertad de conciencia de cada individuo, esto no quita que exista quien pueda tener una fe, de hecho en nuestras filas existimos compañeros creyentes, con la fe sencilla del pueblo, de diversas religiones y tradiciones.
Si buscáramos algo del Antiguo Testamento que nuestra sociedad necesita, es un tiempo jubilar, es un año de Jubileo, donde los siervos modernos que somos los trabajadores seamos liberados de nuestras cadenas, donde la tierra regrese a sus dueños verdaderos, que no son ni los latifundistas ni las multinacionales, y donde las deudas, incluyendo la deuda externa, inmoral e impagable caiga.
Dios no está con ellos, está con los oprimidos, con los que sufren, con los que padecen, con las mujeres maltratadas por el machismo, con los homosexuales discriminados por serlo, con los obreros explotados, con los condenados de la tierra, el resto simplemente es la misma abominación de siempre con lenguaje y ropaje religioso.
Yo tengo un amigo querido, un buen hombre, que lleva un apellido ilustre, por el conocí a un León, pero de verdad. Al León de Rorá.
Este hombre era un campesino que fue llamado a la lucha, igual que el profeta Eliseo, y dirigió la lucha armada de los valdenses en Italia, contra las fuerzas del Papado y de Francia, su combate fue duro, conoció la traición, las derrotas y las victorias, aunque alguien piense que este es una historia de la época moderna es de hoy, porque aquí no hubo sólo ni fundamentalmente un problema teológico, sino político y social, detrás de la Reforma está la burguesía adelante, la pequeña burguesía como vanguardia y el campesinado insurrecto contra el orden feudal.
Hoy son otros tiempos, la burguesía hiede por todos lados, sus voceros toman el lenguaje de la reacción religiosa que en su tiempo era el del cesaropapismo, y hoy es el neopentecostalismo y la teología de la prosperidad entre otros, pero las miradas de los profetas y los héroes nos interpelan. ¿Asistiremos pasivamente frente a la explotación desbocada sin gritar con firmeza? ¿Callaremos para no perder la “respetabilidad” pequeño burguesa? ¿Seremos victimas o seremos héroes?
Vamos a rescatar la Seguridad Social de las garras del gran capital, ya logramos poner en entre dicho a las AFAP, estamos dando todo por los jubilados más pobres y las personas en situación de discapacidad, se que el el León de Rorá, desde donde este le dice a mi amigo y a nosotros adelante!!!.
Comentarios
Publicar un comentario